El santuario es la última novela de la saga de las crónicas vampíricas que he leído.
Suelo leer en el autobús urbano de camino al trabajo.
Hoy cuando he llegado a mi parada me quedaban unas páginas por leer. Aproveché el tiempo perdido mientras se arranca mi ordenador y se abren los programas para terminarlo....
Esta novela no es de las mejores que he leído de su autora (Anne Rice), aunque tiene momentos muy buenos, pero al lado de la magnífica trilogía inicial de las crónicas vampíricas (Entrevista con el vampiro, Lestat el vampiro y la reina de los condenados) es un "hermano pequeño".
El protagonista de la novela, Tarquin, es hijo de una familia rica, con una enorme casa al borde de los pantanos de Nueva Orleans, en una de cuyas islas se encuentra la curiosa construcción circular que llama "el Santuario". Aunque desde la primera hoja de la novela sabemos que el protagonista se convertirá en vampiro, se nos va contando a lo largo del libro la vida de Tarquin, personaje aislado, que ve fantasmas y convive con un espíritu muy unido a él, que llama Goblin, y no es hasta los capítulos finales donde aparecerán los clásicos vampiros.
La relación entre Tarquin y el espíritu Goblin tiene momentos muy buenos en la novela, la aparición de varios fantasmas atormentados y la final relación con Lestat, hacen que la novela sea muy entretenida, aunque el final flojee algo, por lo previsible y lo claramente que prepara la siguiente novela de la saga.
La relación sentimental de los vampiros con el resto del mundo llega a cansar algo después de muchos relatos "vampíricos" donde en todos se relata lo mucho que se quieren o lo hermosos y atractivos que son (hecho mucho en falta algún personaje decididamente negativo, cruel y oscuro).
Parece como si la autora tuviera menos ideas nuevas y se alarga demasiado en escenas que no lo requieren, y no explora otros terrenos que no sean los ya conocidos.
1 comentario:
Meyer, ponme un linkecillo por ahi, que tengo nuevo blog musical. Se admiten peticiones.
Saludos.
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