Merece la pena leer algunas historias de vez en cuando... No todas son graciosas, algunas incluso son tristes, pero abundan más las que buscan la gracia y el chascarrillo.
Por ejemplo, una de las que he leído hace poco
Hace unos meses, quedé con un chico para ir al cine. Fue bastante educado y atento conmigo, hasta que al sentarme en la butaca miró los asientos vacíos a mi lado, me miró a mí y me preguntó con una sonrisa pícara "tú... ¿eres diestra o zurda?". ADV
Y como nota "curiosa", los lectores de ADV pueden votar los comentarios en las categorías "vaya asco de vida", "haberlo pensado antes" y "menuda chorrada".
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